lunes, 8 de septiembre de 2008

* LA DICHOSA LICENCIA DE OBRAS

¿Para cuándo?

¿Quién es el responsable de que no tengamos la licencia de obras para remodelar nuestro estadio?

Ya sabíamos que Emilio Carrillo, bético confeso, que actuó con la celeridad suficiente para satisfacer al otro equipo de la ciudad, no actuaba precisamente como un bólido para hacer que se tramitase la licencia sevillista, pero... ¿y el de ahora?

Han pasado cinco años ya desde que se firmó el acuerdo de reforma del estadio.

Les recuerdo que este club pasea el nombre de Sevilla por todo el mundo y le da una gran imagen a esta ciudad. Esta ciudad, su gobierno, debe actuar en consecuencia y cuanto antes.

¡LICENCIA YÁ!


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   3 comentarios :

  1. Tal vez sea muy mal pensado, pero cierro los ojos y veo a Carrillo en el 2003, justo despues de cerrar el proyecto de remodelación entre el Sevilla FC y el ayuntamiento (por cierto, cinco largos años ya desde entonces), como decía cierro los ojos y lo veo diciendo por lo bajo a sus homónimos:

    "No os preocupeis, ya me encargaré yo de que el Sevilla no construya un estadio nuevo hasta que nuestro Betis termine el suyo. Cueste lo que cueste."

    En ese momento algo así podría sonar a cachondeo, pero hoy, cinco años despues, esta a punto de hacerse realidad.

    Triste realidad...

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  2. Se me ha olvidado comentarlo.

    Que se corra la voz y todos los sevillistas acudamos al estadio con pancartas que digan:

    "¡LICENCIA DE OBRAS YA!"

    Este sábado estaría bien para empezar a los ojos de toda españa por la sexta.

    PD: Ojalá la pancarta con ese tema no termine como la de "cierre del camp nou ya!, lo digo porque ese cierre al final nunca llegó.

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  3. Una vez, el delegado de Urbanismo era sevillista, creo que este año es socio, por lo menos sonreía en julio con un carné cuando se abrió el plazo de la lista de espera.

    Llegó a delegado de Urbanismo, desde el cargo de gestor del estadio de la Cartuja, que algunos llaman olímpico.

    Ese señor nos invitó a abandonar el Sánchez Pizjuán, como solución a nuestros problemas. Decía que era la ÚNICA solución para el Sevilla, cuando a lo mejor era la solución para ese panteón de dinero público, mitad en Sevilla y mitad en Santiponce.
    A lo mejor era la solución a sus manías de grandeza, auque para ello el Sevilla tuviera que renunciar a lo suyo.

    Aquello era salvar el campo de la Cartuja, no al Sevilla. Hoy, el Sevilla, salió de sus ituación, y ese campo, mitad de Sevilla, mitad de Santiponce se sigue llenando de jaramagos.

    A lo mejor ayer tuvo la cara dura de sonreir comiendo tarta.

    ¡LICENCIA YA!

    Pero no esperemos que nos regalen nada desde la otra acera, cuando desde la nuestra tampoco lo hacemos.

    ¡LICENCIA YA!

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