¿ME HE PERDIDO ALGO?
Créanme que hay momentos en que uno intenta guardar la compostura, acordarse de esas cosas del autocontrol, mirar a otro sitio y pensar en cosas que no tienen que ver con el tema y aún así no consigo no explotar en una carcajada enorme.
Yo comprendo que haya personas que quieran investigar su pasado en verde. Comprendo incluso que lo cuenten tal cual aparezca en la prensa, pero aún así puede llegar a ser una burrada, o al menos así lo entenderemos algunos. Las cosas deben tener un contexto donde deben encajar de alguna manera.
En la betispedia esta que pretenden hacer estos señores en respuesta a las "hordas de investigadores sevillistas" que parece quieren desprestigiar la más que comprobada y documentada historia del Betis, nos cuentan lo siguiente:
(...)Cuando el Camponato empezaba a expirar, los béticos desaprovechan el encuentro de rivalidad máxima disputado en "Reina Victoria", el 2 de Fedrero de 1923.
Los béticos se adelantaron pronto, con un gol de Rodríguez, pero el Sevilla empató al final del partido.
Aquel encuentro estuvo rodeado de tristes incidentes.
El jugador bético Llinat, no pudo resistir más su indignación y abofeteó al refereé Rementería.
Acto seguido, el Sr. Blasco Garzón, quien dentro de algunos meses sería nombrado Presidente del Sevilla FC, que estaba presenciando el partido, llamó a las fuerzas de la Guardia Civil, llevándose éstas a Salvador Llinat "conducido por los calles como un vulgar asesino. Pero el Juez de Guardia, sr. Fernández Clérigo, tan pronto tuvo conocimiento de lo sucedido se apresuró a ordenar la inmediata puesta en libertad del sr. Llinat".
Posteriormente, el miércoles día 13, se produjo un acto de desagracio hacia el jugador Verdiblanco, consistente en un banquete.
Los aficionados que quisieron acudir al mismo, tuvieron que dejar constancia de su presencia días antes en el local de la Sociedad Blanquiverde, que estaba en la calle Rivero número 12.
Sin embargo, entre disgusto y disgusto, los béticos quedarían clasificados nuevamente en segunda posición en el Campeonato de Andalucía, tras el Sevilla FC, quien se anotó el galardón. (...)
Es un copy/paste tal cual aparece sin cambiar una sola coma.
Pongamos en orden esta información: Un jugador bético agrede con nocturnidad y alevosía a otro señor que se dedicaba a arbitrar y le atiza ante, probablemente, miles de personas.
Otro señor que está presenciando el partido, ante tal barbarie hace lo que debe hacer, seguramente, cualquier ciudadano -llamar a las autoridades para que no termine de cargarse al referee- pero el delito es que este ciudadano será en el futuro presidente del Sevilla FC, hecho que parece que es el agravante del “delito de cometer un acto de ciudadanía”.
De soslayo entendemos que el hecho de ser futurible presidente del Sevilla, en consecuencia, está en contra del Betis y por tanto queda en el subconsciente bético la demonización del mismo.
Al pobre muchacho que “solo” dio unos golpes al “sinvergüenza” del referee, hay que premiarle y le montan un banquete de aquí no te menees.
Encima “entre disgusto y disgusto” los béticos consiguen ser, a pesar del demonio del sevillismo por cometer estos actos, los segundos una vez más, demostrando un nuevo acto de heroísmo sin parangón.
Perdonen, pero... ¿me he perdido algo?
Prefiero dejar los comentarios a vuestra libre imaginación. No obstante investigaremos los hechos tal y como ocurrieron en la realidad.
Yo comprendo que haya personas que quieran investigar su pasado en verde. Comprendo incluso que lo cuenten tal cual aparezca en la prensa, pero aún así puede llegar a ser una burrada, o al menos así lo entenderemos algunos. Las cosas deben tener un contexto donde deben encajar de alguna manera.
En la betispedia esta que pretenden hacer estos señores en respuesta a las "hordas de investigadores sevillistas" que parece quieren desprestigiar la más que comprobada y documentada historia del Betis, nos cuentan lo siguiente:
(...)Cuando el Camponato empezaba a expirar, los béticos desaprovechan el encuentro de rivalidad máxima disputado en "Reina Victoria", el 2 de Fedrero de 1923.
Los béticos se adelantaron pronto, con un gol de Rodríguez, pero el Sevilla empató al final del partido.
Aquel encuentro estuvo rodeado de tristes incidentes.
El jugador bético Llinat, no pudo resistir más su indignación y abofeteó al refereé Rementería.
Acto seguido, el Sr. Blasco Garzón, quien dentro de algunos meses sería nombrado Presidente del Sevilla FC, que estaba presenciando el partido, llamó a las fuerzas de la Guardia Civil, llevándose éstas a Salvador Llinat "conducido por los calles como un vulgar asesino. Pero el Juez de Guardia, sr. Fernández Clérigo, tan pronto tuvo conocimiento de lo sucedido se apresuró a ordenar la inmediata puesta en libertad del sr. Llinat".
Posteriormente, el miércoles día 13, se produjo un acto de desagracio hacia el jugador Verdiblanco, consistente en un banquete.
Los aficionados que quisieron acudir al mismo, tuvieron que dejar constancia de su presencia días antes en el local de la Sociedad Blanquiverde, que estaba en la calle Rivero número 12.
Sin embargo, entre disgusto y disgusto, los béticos quedarían clasificados nuevamente en segunda posición en el Campeonato de Andalucía, tras el Sevilla FC, quien se anotó el galardón. (...)
Es un copy/paste tal cual aparece sin cambiar una sola coma.
Pongamos en orden esta información: Un jugador bético agrede con nocturnidad y alevosía a otro señor que se dedicaba a arbitrar y le atiza ante, probablemente, miles de personas.
Otro señor que está presenciando el partido, ante tal barbarie hace lo que debe hacer, seguramente, cualquier ciudadano -llamar a las autoridades para que no termine de cargarse al referee- pero el delito es que este ciudadano será en el futuro presidente del Sevilla FC, hecho que parece que es el agravante del “delito de cometer un acto de ciudadanía”.
De soslayo entendemos que el hecho de ser futurible presidente del Sevilla, en consecuencia, está en contra del Betis y por tanto queda en el subconsciente bético la demonización del mismo.
Al pobre muchacho que “solo” dio unos golpes al “sinvergüenza” del referee, hay que premiarle y le montan un banquete de aquí no te menees.
Encima “entre disgusto y disgusto” los béticos consiguen ser, a pesar del demonio del sevillismo por cometer estos actos, los segundos una vez más, demostrando un nuevo acto de heroísmo sin parangón.
Perdonen, pero... ¿me he perdido algo?
Prefiero dejar los comentarios a vuestra libre imaginación. No obstante investigaremos los hechos tal y como ocurrieron en la realidad.
Y a lo mejor, el referee lo puso el Betis...
ResponderEliminarMe suena el apellido.
Por otro lado, Manuel Blasco Garzón, en aquella fecha en la que todavía no era presidente del el Sevilla, era el Presidente de la Sección de Ciencias Morales y Políticas del Excelentísimo Ateno de Sevilla, cargo que ocupó en el curso 1922-23.
Puesto desde el cual potenció una gran campaña de alfabetización en los barrios más desfavorecidos de Sevilla.
ResponderEliminarSi es que Blasco Garzón era "todo un canalla" de la época.. y sevillista además. Vaya por Dios. :)
No se equivoquen;
ResponderEliminarFué el referee el que atacó con su cara la mano del pobre jugador...
Saludos.
ResponderEliminarEs necesario hacer un ejercicio de comprensión: No se puede resistir la indignación, de tal forma que lo correcto, lo aconsejable y laudatorio es abofetear a un referee.
Cualquiera hubiese hecho lo mismo porque estos señores pueden llegar a ser irritantes.
El Sr. Blasco Garzón "quien dentro de unos algunos meses sería nombrado..." ¡Esos tiempos!
Por suerte, ése Sr. Blasco Garzón, con sus actividades culturales (que no las deportivas y sociales donde, como ha hemos podido leer, dejó mucho que desear), puede que contribuyera a mejorar el uso correcto de dichos tiempos.
Especialmente, en los barrios más desfavorecidos porque es bien sabida la preocupación que se toman las gentes muy de derechas por la cultura del pueblo.
El Sr. Juez de Guardia, aventurándome a calificarlo de bético (sin ánimo de ofender), ordenó la pertinente "puesta en libertad".
Y como no podía ser de otra forma, ante el tremendo agravio, un acto de desagravio.
Todo dentro de más elemental de los derechos de las personas a elevarse ante las injusticias arbitrales.
¡Qué cosas!
Cuidaros.
Romero de historiador de payasadas a bufon de Del Nido, va un paso...Ya tienes el ejemplo de Alvarado. Sigue asi, demuestranos lo buenos que erais y lo malos que somos los demas andaluces. Ah! Y la independencia se conquista todos los dias y con un pasado periodistico como el de tu admirado Agustinito, lo mejor que hay que hacer es no ir de ciudadano de izquierdas que en la COPE no trabajan , precisamente, los anarquistas y los comunistas. Por cierto, este cuando empezo a ser independiente ahora o antes? Porque antes informaba tambien del otro equipo de vuestra ciudad y si lo hacia con la misma objetividad que lo hace ahora, pobres lectores del futuro.
ResponderEliminarTu no eres sevillista, tu eres antibetico. Asi que dejate de objetividad, que esa la perdiste conforme te iban educando en el odio al otro equipo. Y no des mas lecciones de moral, que los datos siempre se pueden ver desde dos prismas, ¡so patetico intento de historiador!.
ResponderEliminarSeñor anónimo le veo muy ofuscado. Quizás le moleste ver la realidad.....
ResponderEliminarNo comparto tu forma de hablar y decir las cosas. Si crees que la realidad fue otra simplemente cuentala y danos pruebas y ya esta. Dedicandote a insultar no aportas nada, y la verdad... me produce pena.
No te mosquees y aporta algo (si es que puedes...).
Ayyy...como escuecen algunas verdades entrando asi de sopetón...
ResponderEliminarAporte algo hombre! Como por ejemplo UN NOMBRE POR EL QUE LLAMARLE o prefiere que le dediquemos algún calificativo cariñoso de esos que usted escupe alegremente como por ejemplo "PATETICO"?
Ea, a dormir...
Tántalo,el anónimo se llama Gustavo,rano Gustavo.
ResponderEliminarSaludos.