Matemos al mensajero
Un amigo me ha escrito un email para contarme algo de un rifi-rafe sobre historia que ha tenido lugar en un foro dedicado a estas cosas del fútbol. Créanme que me he divertido muchísimo leyéndolo porque hemos visto las explicaciones que dan algunos “aspirantes a historiadores a la RFEF” de la parte de Huelva, (o al menos están muy avalados, no sabemos bien por qué oscuros motivos) y la indefensión en la que se encuentran ante sus propias teorías cuando se les pone en la picota. Verdaderamente lastimoso.
Cuando desde el lado sevillista hemos expuesto nuestra versión de lo ocurrido en 1890, como un resorte, saltaron algunos defensores del “ardor decano” para, mandoble en mano, (permítanme la guasa), luchar para conseguir pruebas para asentar a su club como tal. La histórica búsqueda del “Santo Grial” tiene mucho que ver con estas actitudes y la verdad, muchos se quedaron tranquilos en Huelva con la partida de los “cruzados” hacia las tierras hispalenses, algo que tendremos que soportar, sin desmerecer a los muchos amigos de Huelva con los que contamos.
Fruto del “arduo trabajo” de investigación del muchachito onubense hemos podido leer algunas perlas como esta que incluso llegó a publicar en un libro dirigido a los historiadores sevillistas:
“…Sin embargo, tal y como hemos adelantado ya, la última parte de la nota de prensa, nunca ha sido mostrada por los historiadores del Sevilla FC.
En el recuadro azul vemos una de las partes omitidas, en la cual se refieren claramente al equipo Sevillano como “Club Inglés de Sevilla”.
Por tanto nuestra pregunta obvia es:
Si la denominación Social de ese Club Sevillano hubiera sido “Sevilla Football Club” entonces ¿ por qué no se refieren a él en dicha traducción con esa teórica denominación Social, tal y como precisamente hacen con el “Huelva Recreation”?.
Ante estas evidencias y datos nos resulta obvio deducir que aquel equipo de fútbol de Sevilla sencillamente no tenía denominación alguna…”
Es una afirmación categórica. No hay otra posibilidad y lo que dice el periodista en esa crónica va a misa, (según él, claro).
A pesar de que Isaías White se presenta como “Secretario” del Sevilla Football Club, el hecho de que el periodista le llame “club inglés” no puede ser interpretado de otras formas posibles. Desde el lado sevillista nunca se ha discutido que fuese un “club inglés”, de hecho este deporte viene de Inglaterra y son muchos los ingleses que integraban este primitivo club, por lo tanto esgrimimos que ambas definiciones son compatibles y para nada se estorban, sino que se complementan.
Pero claro, ¿cómo va a ser válido para ti lo que es para mí?, o eso pensará el aspirante a historiador onubense a tenor de lo que les exponemos a continuación.
Hace no mucho descubrimos en este blog, gracias al magnífico equipo de investigación del que tengo orgullo ser una pequeña parte, un artículo de “El Imparcial” de 1904, donde se dice claramente que el Recreativo de Huelva se inauguraba en esos instantes y que por ello realizaban unos festejos para celebrarlo. En otra crónica análoga, podemos ver como se le tilda al Recreativo como de “nuevo Club”.
El antiguo club de recreo de la colonia inglesa de Huelva nacido en 1889 desapareció a lo largo de la última década del siglo XIX y nunca se le conoció actividad “footballística” alguna desde 1893. Las pruebas claras demuestran que se fundó, esta vez sí, un nuevo Club llamado Recreativo de Huelva.
¿Cómo justifica y explica esto el aspirante onubense a historiador de la RFEF ?
Efectivamente se dice literalmente “…Socios del nuevo Club…”, pero resulta evidente a todas luces que el periodista o la persona encargada de redacción de la nota de prensa estaba equivocada o simplemente la habían informado erróneamente si con lo de “nuevo Club” se quisiera referir a un Club recién constituido y absolutamente nuevo. Las notas de prensa, actas conservadas en el Archivo Histórico de Rio Tinto y la correspondencia del Ayuntamiento de Huelva demuestran que el Recreativo seguía existiendo y practicando el football.
Pero es que aún suponiendo que la redacción es correcta, el periodista no tiene necesariamente porque estar refiriéndose a un “Nuevo Club” en el sentido literal de las palabras, sino a una nueva situación o una nueva etapa que se estuviera viviendo en el seno de una sociedad ya existente. ¿Cuántas veces nos referimos a los cambios sufridos por equipos o instituciones como “nuevas etapas” en los mismos?.
Gran investigador, sí señor, el periodista se equivocó en esta ocasión, ¡vaya por Dios! No pudo suceder en otras crónicas, pero en esta sí. Bien podrá decir que hay otros artículos donde se expresa que el Club sevillista era un Club inglés, pero nosotros podremos aportar otras donde se habla de “inauguración del Club onubense”.
Pero imaginen por un momento que yo usase las mismas palabras demagógicas para justificar la expresión de “Club inglés”, total, matemos al mensajero y todo queda así justificado ¿verdad?:
Efectivamente se dice literalmente “…Club inglés…”, pero resulta evidente a todas luces que el periodista o la persona encargada de redacción de la nota de prensa estaba equivocada o simplemente la habían informado erróneamente si con lo de “Club inglés” se quisiera referir a un grupo de amigos. Las notas de prensa, conservadas en el Archivo Histórico Provincial, y otros artículos demuestran que el Sevilla Football Club era un club perfectamente constituido.
Pero es que aún suponiendo que la redacción es correcta, el periodista no tiene necesariamente porque estar refiriéndose a un “Club inglés” en el sentido literal de las palabras, sino a que entendía que este club pertenecía a la colonia inglesa de Sevilla, craso error ya que muchos de sus componentes eran sevillanos natos como hemos podido demostrar.
¿Es que acaso podría rebatir esta explicación? Pues tendrá que rebatirse a sí mismo. Y que conste, el amigo además está avalado por los historiadores de la RFEF. Vergonzoso.
Gracias José Antonio por tu información.
.
Saludos.
ResponderEliminarMe recuerda al chiste aquel de, creo, Mingote -quizás Forges-, en que un ciudadano, tras unas elecciones, preguntaba a otro:
¿Quiénes son los que hemos ganado?
Pues eso.
Lo que no es, no puede ser y además, es imposible (plovelbio chino).
Y Groucho gritando: ¡echad maderaaaa!
Cuídate.
¿Le hacemos a este tío la lista de todos los sitios que se ha publicado?
ResponderEliminar¿No será que él no se ha preocupado en documentarse?
No sólo no se documenta de dónde se ha publicado, sino que el recorte del que habla no se lo lee entrero.
Que dificil es convencer al que no quiere, ardua tarea teneis. Adelante ya que habemos muchos a los que nos estais convenciendo.
ResponderEliminarJosé L. Herrera.
Yo creo que es mu facil "tirar por la borda" la traducción del periodista en aquella carta...tan facil como mandarle la carta o llamar a un licenciado en filologia inglesa o catedrático y ponerlo en el programa de Historia en la radio del Sevilla Futbol Club.
ResponderEliminarCuando el licenciado traduzca la carta, se graba esa traducción y si hay que ponérsela a un tal Balmont, pues se le pone.
Por cierto, muy bueno este post. EL doble rasero que se trata ciertos documentos históricos en cuestión de traducción es alarmante. Por ejemplo: El tal Balmont, en ciertas traducciones llama Club inglés de Riotinto al Riotinto Football Club (primer club de foot-ball fundando en España), con eso está todo dicho.
Un saludo.
Ignacio Dominguez
¿Quién es Balmont?
ResponderEliminar:)
Un saludo Ignacio.
Está claro que estos choqueritos al no poder haber llegado nunca más lejos de jugar un par de temporadas en primera intentan por todos los medios ser el "decano" ya sea verdad mentira o todo lo contrario. Quizás si entre TODOS los andaluces por decisión de la antisevillista Junta de Andalucía no se le hubiera salvado en su momento ahora no habría discusión alguna
ResponderEliminar