LA COPA DEL CENTENARIO
Retumbó en mis oídos a mediados de 2005. Un ruido de rotura de cristales. Una voz chirría, como de bruja Avería, intentando vomitar toda la verde y amarga hiel sobre la orgullosa blanca centuria, que ondeaba al viento por aquellos días el símbolo de la leyenda del “Cien” con fondo carmesí.
Medio cuerpo fuera como si fuese a caer del balcón, asomaba casi obscenamente sobre la jauría de verde que aullaba respondiendo al líder de la manada. Una venganza efímera en el pensamiento, un espejismo de lo que siempre quisieron ser pero nunca pudieron. Con los ojos inyectados de sangre, cuello inflamado, tupé leonado… escupió:
“…AQUÍ TENÉIS LA COPA DEL CENTENARIOOOO…”
Ni tan siquiera en ese momento tan dulce fueron capaces de olvidarse del rival. La histeria colectiva de aquel millón de criaturas agolpadas –nunca son menos de un millón aunque se reúnan 3- se colapsaba bajo el balcón del Ayuntamiento, que llegó a creer que podrían alcanzar en breve, tras cerca de cien años, al más grande.
¿Ustede habéi visto una final ni ná?
Qué lástima.
Aún sin haber visto finales, nadie aún en Andalucía por aquel año de 2005 nos había arrebatado el ser el club más laureado, a pesar de llevar más de 40 años sin llegar a ninguna final. El eterno campeón de Andalucía lo seguía siendo.
Pero el más grande calló. Siguió ondeando y paseando su bandera carmesí por la ciudad del Guadalquivir en aquel año de gloria. Se tragó el sapo, nada de respuestas mediáticas, nada de peleas barriobajeras, fiel a su estilo de toda la vida, eso es de otros. Señorío, silencio, caballerosidad, como siempre desde tiempos inmemoriales. Estilo Sevilla FC… las afrentas hay que discernirlas en el campo de duelo juego.
Por más que le pusiesen bustos hieráticos a sus espaldas, por más salfumán que echasen en los vestuarios, por más que un tonto del haba se subiese a 30 metros a poner un escudo triangular a San Fernando en la portada de Feria, por más monedas que le tirasen para herirle, o botellazos, o sábanas pintarrajeás, o camisetas de “lociento” de los besawebos de donmanué… silencio. Estilo sevillista.
Cuando alguien quiera saber qué significa tener estilo, solo tiene que echar una mirada a este triste episodio contemporáneo de la historia del fútbol sevillano antes de que sea distorsionado por las huestes de verde con el tiempo en “victim-mode”.
Aquel trofeo forjado en plata en 1990, es el segundo que se fabrica del mismo modelo, fue ultrajado, vilipendiado, no respetado como lo que significaba, paseado como el que exhibe un animal exótico de circo, llevado a bodas, desconchado, ensuciado, maltratado y durante un tiempo sirvió como adorno personal en el domicilio particular del busto con patas. Como dice un amigo mío aquello no era la Copa del Rey, sino la copa del reí, ese toque personal que tan solo ellos saben darle.
Pero llegó la hora y a cada cerdo le llega su “sanmartín”.
Durante su supuesto centenario, (dos años después), tuvieron que soportar la llegada de dos copas de la UEFA, una Supercopa de Europa, una Copa del Campeonato de España, dos trofeos de mejor equipo del mundo y una supercopa de España a Sevilla. Campo de duelo juego donde había que hablar. Si desearon aguar la fiesta sevillista en 2005, en 2007 se suicidaron directamente.
Ni una sola referencia oficial a su centenario por parte del Sevilla FC. Respeto. Una guantá sin manos que no pudieron soportar.
El semi-dios, el elegido, el mesías al que todos aclamaban, el que más quisierais tener un donmanué, sí, el de las asendías; aquel que se asomó al balcón del Ayuntamiento comenzó a caer estrepitosamente por el peso de sus palabras que tiraban de él desde el mismo balcón desde el que las vomitó... justo desde ese mismo instante. Sus palabras fueron su sentencia de muerte presidencialista a posteriori en el club verdiblanco. Un busto que recordaba a la estatua de un Sadam de la vida cayendo estrepitosamente contra el suelo y levantando una polvareda, derribada por aquellos que querían santificarle y le besaban los pies poco antes.
El presente año que está a punto de acabar, el Sevilla FC volvió a ganar la copa del Campeonato de España. La copa que donmanué definió como la del Centenario sevillista por segunda vez desde entonces, (sin saberlo la describieron perfectamente), descansa con dignidad para siempre en las vitrinas del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán y si quieren verla, esa que ganaron en 2005, tendrán que acercarse a nuestras cristalinas vitrinas con fondo blanco níveo y purificador, donde recupera su prestigio perdido, es respetada por lo que significa y admirada porque es nuestra y estamos acostumbrados a rendirle culto porque tenemos cinco.
Como dice mi amigo Cornelio:
“…Tener la Copa en propiedad es un orgullo.
El día que vayas a ver los trofeos, pasen los años que pasen, podrás decir, ESTA copa la vi yo ganar en el Bernabéu, o en el Nou Camp.
ESTA Y NO OTRA, no una réplica al 70%.
En este caso va unida a un hecho especial, es la Copa del Club que fue el CAMPEÓN DE ESPAÑA, cuando ESPAÑA FUE CAMPEONA DEL MUNDO.
Eso es un hecho importante en la historia del fútbol español, que al fin y al cabo es lo que recuerdan las copas.
Igual, sin perspectiva, parezca intrascendente, pero cuando pasen cincuenta años, los nuestros podrán decir, esa copa está aquí por que el Sevilla fue el Campeón de España y España del mundo…”
Oiga usted, que se me caen las lágrimas con esta pieza maravillosa. De sobras sabe cuánto le admiro, pero hoy, con este post, se ha superado. Usted, y Don Cornelio. Dejadme llorar a gusto. De emoción. Igual que la Copa, hay que preservar este texto en la Memoria para siempre.
ResponderEliminarBrillante, detallada, y ajustada exposición de los acontecimientos. Mi felicitación D. Carlos.
ResponderEliminarZafios alegatos y comportamientos, encajados con excelsa categoría y estilo, por los representantes de nuestro Club.
Esta Copa de España, tiene otro dato muy singular: En 2010 nos la entregó el Príncipe de Asturias. ¿Sucedió alguna vez?
Saludos.
Pues me sumo a la felicitación de D. Enrique.
ResponderEliminarEs de lo mejor que le he leido Sr. Romero.
Cuando a Vd. le sale la vena poética, su pluma es inigualable.
Perdón por lo de vena y pluma, ha salido sin querer. :D
Lo dicho, nuestra y sólo nuestra, la Copa es nuestra, del Club Grande de Andalucía, del Eterno Campeón.
Un abrazo.
¿En qué estaría usted pensando D. Antonio?
ResponderEliminarNo señor Arjona, nunca antes fue entregada por un príncipe, siempre por el rey y en tiempos de Franco por él mismo y algún general ocasional como Moscardó.
Un saludo.
Carlos, como siempre brillante, este post estará un tiempecito en mi apartado de destacados donde eres bastante asiduo. Siempre quise decir algo parecido, hay cosas que no olvido, pero solo me saldrían insultos. Pero a ti no te hacen falta las palabras sucias para describir lo que sientes. Tienes ese Don. Por eso tienes el mejor blog sevillistas de toda la blogosfera.
ResponderEliminarUn saludo y felices fiestas.
Hoy he ido a abrir la puerta de mi casa. He sacado el llavero y me he dado cuenta que era una réplica de aquella copa que ganamos en le Bernabéu.
ResponderEliminarAquella que tuvo un sabor especial, porque aunque hubierémos ganado dos UEFAs y una Supercopa de Europa, nos faltaba, era una copa de la que teníamos sed.
Genial el post, don Carlos.
Antes de abrir la puerta, apreté fuerte el llavero, estaba emocionado...
Eso es, así me gusta. Un post cargado de ese espíritu navideño que nos invade estos días tan señalados. Con su sello, delicioso, como pocos.
ResponderEliminarFeliz Navidad a todos... ;) Cracks.
Bueno, mañana pondré la estampita de rigor, pero hoy todavía no es navidad, que conste. XD
ResponderEliminar¡De sombrerazo!
ResponderEliminarPapá gracias por hacerme sevillista y así poder disfrutar de artículos como estos!!
ResponderEliminarGracias por tus palabras!!
Magnífico post!!
Un abrazo.
Emtho.
Impresionante, hoy le felicito por este enorme post y mañana lo haré por la Navidad .
ResponderEliminarUn abrazo.
POSD: Le pido permiso para colgar este post en mi blog, por supuesto mencionando a su autor.
Felicito su elegancia al escribir, y sobre todo la mejor de las versiones que he leido sobre la nefasta afición que gritó aquello de "la copa del centenario".
ResponderEliminarCon perpectiva histórica, para ellos se ha convertido en la copa de la verguenza. El señor del busto el ejemplo de la afición más ridícula del mundo.
Un saludo.
Todo tuyo Rafa.
ResponderEliminarde mamazo...
ResponderEliminarQué pedazo de post te ha salido amigo Carlos, se puede decir más alto pero nunca más claro.
ResponderEliminarA mi también me ha emocionado muchísimo, enhorabuena es de lo mejor que has escrito, no me atrevo a decir lo mejor, porque habitualmente lo haces de manera tan magnífica que no sabría cual es el mejor, pero desde luego si uno de los destacados.
Y como tu dices el que quiera verla, que vaya al Sánchez-Pizjuán.
Un abrazo y felices fiestas
Mi copa, tu copa, nuestra copa, la que será admirada y adorada por los sevillistas ha sido la musa de mi inspiración. Han intentado hacernos tanto daño y el el boomerang ha sido tan certero...
ResponderEliminarGracias Mayte.
Bravo,bravo y bravo,Don Carlos!!
ResponderEliminarTendremos que ir a ver NUESTRA copa :)
Felices fiestas,para ti y toda tu gente!
Un abrazo!!
Feliz Navidad
ResponderEliminarhttp://arteysalero.wordpress.com/2010/12/24/este-mensaje-es-para-ti/
Felices Fiestas don Carlos Romero!
ResponderEliminarY para todos los Guardianes de la Memoria!
Vuestra labor es impagable.
Tengan mi eterna gratitud.
Al final va a ser verdad que el Karma existe. Si es así no les queda poca a los del otro equipo de la ciudad por tanta injuria, tanta calumnia, y tanta bilis vertida injusta y falsamente.
ResponderEliminarMe gustaría aportar un dato más sobre el hecho de que un príncipe nos entregara la Copa: Ese príncipe era seguidor reconocido del equipo rival, aunque soy incapaz de recordar cuál era, puesto que sólo se recuerda a los vencedores, y no a los vencedores morales.
Buenas tardes Carlos,
ResponderEliminarfelicidades por el bonito post.
Una duda me queda, ¿dónde se puede contemplar la copa?
Felices fiestas a todos.
Carlos, normalmente estoy de acuerdo contigo en muchos temas y lo sigo estando con tu opinión acerca del impresentable que ha regido los destinos del Betis durante 18 largos años.
ResponderEliminarEso sí, creo que no es bueno generalizar con la afición del Betis porque en ella, al igual que en la del Sevilla, hay gente elegante y, por contra, de lo más hortera y chabacana también, entre estos últimos el césar-nerón del busto de bronce, con sus sábanas pitorrojeás y la tienda de veinte duros.
Creo que también es injusto definir como señorial a toda la afición del Sevilla y que éste nunca se ha acordado del Betis cuando tú mismo estás hablando del Betis y aún recuerdo en vuestro estadio a principios de los noventa ese ataud dedicado al Betis, augurando el final del club de la Palmera y en un derby varios jugadores béticos aseguraron ver a vuestro director deportivo echándose las manos a sus partes íntimas, gesto dedicado a jugadores y técnicos del Real Betis. Y mejor que no hable del ex-portero de la EM, la mayor vergüenza que hay aún en vuestro club (algo que comparten conmigo muchos amigos y conocidos sevilistas), un provocador en toda regla, no sólo con el Betis sino con más equipos de fútbol, sean españoles o del extranjero. No logro entender que este personaje siga ahí aún.
Escribe un bético no antisevillista (de hecho tengo muchos amigos sevillistas) y Carlos me conoce pero nunca es bueno generalizar tanto en un club como en otro.
Felices Fiestas a los sevillistas y un abrazo Carlos.
Chusti, este es un escrito de rabia contenida de muchos años soportando al busto con patas. No es un escrito dirigido al beticismo en general ni a los amigos en verdiblanco que han luchado hasta la saciedad por quitarse al carcamal con tupé, es un escrito dirigido a él mismo, aquel día precisamente tan nefasto para el futbol en general y para los que bramaron, gritaron y asintieron con él tras la famosa frase.
ResponderEliminarSi tú no estabas allí, o si estabas y no asentiste no tienes por qué darte por aludido.
Debes diferenciar todos los hechos que describo que pertencen a la política de una directiva, que para bien o para mal representó al Betis, en comparación a como actuó la directiva sevillista durante ese tiempo. No se hace referencia a si un público es señorial o no, es la política señorial de la institución en sí, la grada habla aquí y allí de la misma forma.
Que un delegado de camp, entrenador o jugador actúe de una forma u otra es cosa bien distinta y siempre hay que datar lo que se comenta.
No me he referido, por ejemplo, al chico de Tarifa, Luis Fernandez, entrenador bético que es para echarle de comer aparte, ni a Dani, ni a Serra Ferrer, ni a Rodríguez de la Borbolla, ni a Ballesteros con "la ramona", etc, etc, etc... un sinfín de despropósitos que la directiva sevillista ha aguantado estoicamente sin responder, al menos eso me lo reconocerás.
Si hubo béticos que asintieron aquel día gritando y alegrándose con la maldita frase y yo lo aguanté, esos, precisamente esos que lo hicieron y no otros hoy tienen que aguantarme a mí. El dolor de barriga y el entripado es igual para todos.
Espero que lo comprendas.
paco delgadodijo: de mamazo pedazo de escrito si señor con dos eggs da gloria como y de que forma se escribe parte de la historia y como y de que forma se informa a la aficion en general para que perdure en eltiempo gracias por el articulo de chapeau
ResponderEliminarHola de nuevo Carlos. Aclarado el asunto.
ResponderEliminarLa última vez que asistí a un acto multitudinario bético con Lopera fue durante el ascenso de 2001 en la Plaza Nueva y ya me tocó los cataplines este ¿señor?, ególatra a más no poder, adquiriendo protagonismo y robándoselo a los futbolistas que lograron la proeza en Jaén, con aquello de "me voy, no puedo más". Desde entonces, le eché la cruz. Por tanto, no estuve ni en los festejos de la Copa del Rey de 2005 ni en los actos de nuestro cutre centenario por obra y gracia del césar nerón farusiano-rulosiano-incecosiano-frigimuebliano, etc.
De los que nombras, sólo Serra y Dani, a pesar de sus lesiones y sin haber sido un buen futbolista, me parecen respetables. Eso sí, si alguna vez han echo declaraciones o gestos feos contra vuestro club no seré el que salga en su defensa. Los demás que nombras me merecen muy poco respeto. Por cierto, ¿sabías que el de Tarifa, durante una entrevista en Radio Sevilla (SER) en su etapa al frente del Athletic, comentó que era sevillista y que de pequeño iba con su tío desde Tarifa, antes de emigrar a Francia, al Sánchez Pizjuán, dejando caer que le gustaría algún día entrenar en Nervión. Cosa que no se cumplió y al final, paradojas de la vida, aterrizó en Heliópolis.
Pues la verdad, chusti, al de Tarifa no se le notó nada que era sevillista. Anda que si no llega a serlo, no sé que hubiese hecho.
ResponderEliminarXD
Saludos.
ResponderEliminarD. Carlos, ya he aludido a éste artículo en mi blog, como bien sabe.
Le pediría, por favor, que lo deje en portada un tiempo porque merece la pena.
D. Chustikov, un placer leerle siempre.
Cuidaros.
Hombre D. Chustikov;
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y muchas felicidades, extensible a todos los amigos de Betislibre.com
grande carlos una vez mas, no quiero ni pensar que toda esta historia y el presente fuese al reves... miedo me da solo de pensarlo.
ResponderEliminarfeliz navidad a todos los sevillanos.
Felicidades y mil veces gracias.
ResponderEliminarTodo un honor leerle.
Saludos.