LOS COLORES DEL REAL BETIS BALOMPIÉ
POR PEPE MELERO
“No nos agrada un hecho por que lo juzguemos verdadero, sino que lo juzgamos verdadero porque nos agrada”
Hipólito Taine
En Junio de 1958 el semanario “Oiga” publica una entrevista al que fuera primer presidente y ex jugador del Sevilla Balompié, club originario del actual Real Betis Balompié, Juan del Castillo Ochoa, con motivo de las Bodas de Oro que en ese año celebraba el club verdiblanco. Dicha entrevista está plagada de una serie de errores, debido posiblemente a una debilitada memoria de un ya por esas fechas anciano ex presidente bético, el cual llega a afirmar entre otras cosas que llegó a ocupar una segunda presidencia en 1917 y que volvió en ese mismo año a jugar en el equipo bético, datos erróneos pero en la actualidad felizmente subsanados y corregidos.
Pero lo que llama poderosamente la atención es un error bastante significativo y que incomprensiblemente se ha prolongado en el tiempo hasta llegar a nuestros días, como es el que el veterano militar designara el azul y blanco como los primitivos colores del equipo balompédico, algo que como veremos más adelante, pueda deberse a un error de apreciación.
En un principio, el Sevilla Balompié, como ocurriera antes con el Sevilla F.C. y posteriormente con el Betis F.C. utilizó el blanco como primer color en su camiseta, sin que exista otro motivo más que el que era esa posiblemente la equipación más fácil de conseguir por esos años. El primer documento fotográfico que se tiene de esa primera equipación se obtiene gracias a uno de sus fundadores, Diego López, el cual aporta dicha fotografía que fue publicada en distintos periódicos sevillanos con motivo de las Bodas de Oro del Real Betis Balompié.
PRIMERA FOTO DEL BALOMPIÉ DE BLANCO CON LOS HNOS. GUTIÉRREZ QUE FUNDARON EL BETIS FC
Muy poco debió durar el color blanco y da la sensación que debió de ser algo provisional ya que en 1910,un año aproximadamente después de la fundación del equipo balompédico, la revista malagueña “La Unión Ilustrada”, publica una crónica de un partido entre el Sevilla Balompié y el Betis F.C. el día 27 de Octubre donde aparece una fotografía de un gran valor histórico que muestra por primera vez al Sevilla Balompié con la originaria camiseta a rayas verticales verdes y blancas, las mismas que trajera desde Dumfries, (Glasgow), el onubense natural de Isla Cristina y capitán del equipo D. Manuel Ramos Asensio, el cual cursaba sus estudios en dicha ciudad escocesa, donde conoció el foot-ball por primera vez y donde el equipo del Celtic lucia los mismos colores. Este documento demuestra que, como mínimo, en 1910 ya utilizaba el Sevilla Balompié el verde y blanco en sus camisetas, desmintiendo la teoría que últimamente se ha venido divulgando donde se habla del estreno de dicha camiseta en 1912, basándose en un articulo de ese año, en el que se anuncia un partido entre el Sevilla Balompié y el Betis F.C. y donde se señala que el primero jugara de verde y el Betis F.C. de blanco, no indicando en ningún momento que esa fuera la primera vez que dichos clubs lucirían esos colores.
El Sevilla Balompié siguió usando dichas camisetas hasta la unificación con el Real Betis F.C. el 27 de Diciembre de 1914, unión que dio lugar al actual Real Betis Balompié, estrenando una semana después curiosamente unas nuevas camisetas que según algunos historiadores también había traído desde Escocia el capitán del equipo Ramos Asensio. La equipación consistía en unas camisetas a rayas verticales negras y verdes y pantalón blanco, aunque desde otras fuentes se apunta a que las rayas eran negras y amarillas. En cualquier caso fue algo muy puntual y casi anecdótico ya que solo se jugaron dos partidos con dichas camisetas, puesto que el 5 de Enero de ese 1915, (dos días después del estreno de esa equipación), el Real Betis estrena nueva indumentaria en un partido en el que se enfrenta al Sevilla F.C. en un match en el que se disputaba una copa donada por la “Sociedad Artística Sevillana”. La nueva equipación consistía en una camiseta sin rayas y de un verde algo más oscuro que el anteriormente usado, que la prensa denominó “verde botella” y pantalón blanco. Verde y blanco, blanco y verde. El equipo bético por tanto seguía fiel a sus originarios colores, los que el capitán del equipo Ramos Asensio había exportado tiempo atrás desde tierras escocesas.
Así lo reflejó el “Noticiero Sevillano” con fecha de Enero de 1915.
Y se siguieron produciendo enfrentamientos entre béticos y sevillistas, acrecentándose aún mas si cabe la rivalidad entre ambos equipos. Así, el 7 de Febrero en el campo del Sevilla F.C. se disputo un partido entre ambos clubes, eliminatorio para un torneo a disputar en San Fernando, con una copa en juego donada por el Duque de Santo Mauro. El partido fue muy duro y disputado ganándolo finalmente el equipo sevillista por un apretado 4 a 3, causando gran alegría entre los “merengues”, (así se les llamaba a los sevillistas en aquellos años) y la lógica decepción entre los “pepinos”, que era como se denominaba a los verdiblancos. Tal fue la alegría que despertó la posibilidad de disputar dicha copa en tierras gaditanas, que tanto jugadores como directivos y algunos socios del club blanco organizaron un banquete en un céntrico restaurante donde -y según reflejaba “El Correo de Andalucía” al día siguiente-
“…el menú fue excelente y la animación grandísima y durante el banquete se hacían comentarios sobre el partido, chistes muy oportunos y de vez en cuando un pepinillo volaba por la mesa...”
Evidentemente el “pepinillo” hacia alusión a los jugadores béticos debido al color de sus camisetas.
EL CORREO DE ANDALUCÍA 8-2-1915
En 1917 se iba producir uno de esos episodios de rivalidad cainita tan frecuentes entre los dos clubs sevillanos. El hecho ocurrió el 6 de Enero y en un choque entre el Sevilla F.C y el F.C. Malagueño, correspondiente a la semifinal del Campeonato de Andalucía en el que el equipo blanco ganó 3-1 y se clasificó para la final del campeonato que días después conseguiría adjudicarse por primera vez en su Historia. Los hechos ocurrieron una vez comenzado el partido cuando los aficionados sevillistas que llenaron el Mercantil se quedaron enormemente sorprendidos cuando desde una zona del campo y en el paroxismo de la rivalidad, se comenzó a pitar y abuchear al equipo blanco cada vez que tocaba el balón, aplaudiendo y vitoreando al conjunto malagueño cuando la pelota le llegaba a estos. Esto, lógicamente, provocó un gran enfado entre los aficionados sevillistas, sobre todo a uno de ellos, el cual escribió una carta publicada dos días después en el “Correo de Andalucía” y que bajo el significativo titulo de “La idiosincrasia de un pueblo”, cargaba contra estos aficionados béticos a los que les echaba en cara esa actitud tan poco elegante y que se debía, decía este aficionado, a la envidia que se le tenia al Sevilla F.C. , reprochándoles que esa envidia “ agresiva no escondiera su verde cara...”
Nos encontrábamos en 1917, solo quedaba un año para que se celebrara la histórica “Asamblea de Ronda” donde se habría de designar los símbolos y colores representativos de nuestra región y Real Betis Balompié desde prácticamente su fundación, seguía luciendo el verde y blanco en sus equipaciones, a sus seguidores se les llamaba “pepinos” y en definitiva y como hemos podido comprobar, eran esos los colores que siempre se asociaba tanto al Club como a sus aficionados, los colores REPRESENTATIVOS de la entidad bética.
El 28 de Enero de 1917 se disputó un partido del Campeonato de Sevilla en el campo del Mercantil, feudo que el Sevilla F.C. tenía en alquiler y lugar donde se disputaban los partidos oficiales, (campeonato local y regional), por ser el único campo vallado y con las medidas reglamentarias que existía en nuestra región, (esto ocurrió hasta la temporada 1917-1918). Dicho partido lo disputaron el Real Betis y el Español de Sevilla, ganando los verdiblancos al modesto equipo españolista por 4 goles a 0. Pero lo que llamo la atención de periodistas y aficionados que presenciaron el choque fue la equipación con la que salto al terreno de juego el R. Betis, una equipación que consistía en camiseta azul y calzonas blancas.
El cronista del diario “El Liberal”,que no era otro que el presidente sevillista Paco Alba que solía firmar sus crónicas con el seudónimo de “Inside Rigth”, bastante sorprendido por cierto, afirmaba sobre dichas camisetas que debían de ser “los nuevos colores del equipo Real”. Unas declaraciones a tener en cuenta sobre todo por quien las dice, el presidente blanco que antes de serlo fue jugador del equipo sevillista y estuvo presente en los primeros enfrentamientos entre sevillistas y balompédicos, siendo testigo directo solo unos años antes de los primeros pasos dados por el equipo verdiblanco. Este documento, junto al resto de crónicas de ese partido donde se habla del estreno de esas camisetas, en contraposición con las declaraciones efectuadas en 1918 por el primer presidente verdiblanco D. Juan del Castillo Ochoa y de las que hablamos al principio.
Existe una teoría sobre el origen de estas camisetas que habla sobre la posibilidad de que fueran de color azul, (azul-prusia la definió la prensa), debido a ser este el color del cuerpo de Infantería, incluso de la artillería, al que pertenecían algunos de los fundadores del Sevilla Balompié, militares la mayoría como es bien sabido. Un dato que refuerza esta teoría es el hecho de que muchos de estos pioneros en ese mismo año, y según sabemos por la prensa, volvieron de sus respectivos destinos militares para incorporarse al club, enfrentándose incluso en un partido amistoso celebrado el día 30 de Diciembre de 1917 al primer equipo bético que vistió la recién estrenada camiseta azul, vistiendo el “antiguo Balompié”, (así se le llamó desde la prensa), con la que era en ese tiempo la equipación del segundo equipo, esto es camiseta y calzonas blancas.
Unos meses después el “Correo de Andalucía” daba una noticia suponemos bastante esperada por sus dirigentes y socios. Concretamente fue el 6 de Octubre cuando se anunciaba que por fin el club conseguiría de alguna manera cercar su campo con una valla de madera. Este hecho supuso un paso importante en el crecimiento del Club, ya que desde ese momento la mayoría de sus seguidores pagaban por ver a su equipo y así se pudo adquirir a grandes y reconocidos jugadores; desde el defensa Barzanallana o Canda, hasta los internacionales Balbino o Artola, para los que hubo incluso que echar mano de las influencias militares de las que gozaba el club verdiblanco, como en el caso del vasco Artola que realizaba el servicio militar en Madrid, donde llegó a debutar en el mismísimo Real Madrid, (semanario “Madrid Sport” 1 de Marzo 1917) y fue trasladado a un cuartel de nuestra ciudad.
A todos estos jugadores lógicamente había que pagarles,ya que, aunque el profesionalismo aún no estaba legalizado,el “amateurismo marrón” o profesionalismo encubierto era algo que estaba a la orden del día y muy extendido en el fútbol español,y todos,absolutamente todos los clubs en mayor o menor medida hacia uso de él.
El club bético,como antes hiciera el Sevilla F.C. con las míticas “Tablas rojas”, pintó las referidas vallas de madera que circundaban su nuevo campo con -y como no podía ser de otra forma- los colores representativos de la entidad, llamándose el nuevo campo de la “Enramadilla”, popularmente conocido como el campo de las “Tablas verdes”.
EL CORREO DE ANDALUCÍA 6-10-1917
Y, efectivamente, según hemos podido comprobar por las diferentes crónicas de los partidos que disputo el equipo bético, se siguió utilizando estas nuevas camisetas en el año 1918, como ocurrió el 24 de Febrero en el derbi posiblemente más escandaloso de la Historia del fútbol sevillano, como el que fue jugado en ese día en el que se protagonizaron unos actos vandálicos que acabaron en el apuñalamiento del medio sevillista Manuel Pérez.
FOTO DEL PARTIDO MENCIONADO DONDE SE OBSERVA AL REAL BETIS CON CAMISETA AZUL
También en todos los partidos que tenemos recogidos al año siguiente, en 1919, aparece el equipo bético con dichas camisetas azules, como reflejaba el “Correo de Andalucía”, con fecha 12 de Diciembre de dicho año.
Resulta difícil datar la fecha exacta en la que el conjunto bético volvió a utilizar su originaria y representativa equipación verde y blanca, aunque por los datos que tenemos, la primera fotografía que hemos podido localizar es la publicada en el semanario madrileño “Madrid Sport”, del día 15 de Julio, en la que se cita al equipo verdiblanco que disputó el Campeonato de Sevilla de ese año, aunque es posible que en ese 1920 y durante un tiempo se compaginaran ambas equipaciones.
EL CORREO DE ANDALUCÍA 1-5-1920
En este ultimo periodo del que hablamos y desde prácticamente desde su fundación, el R. Betis fue un club marcado por una gran inestabilidad y por frecuentes desavenencias entre sus dirigentes, que en ocasiones originó en el abandono de muchos de ellos, a veces de forma definitiva y en otras ocasiones de forma momentánea, hasta que volvían de nuevo al club. En estos años el sillón presidencial fue poco menos que un tiovivo, teniendo recogidos desde la temporada 1917/1918 hasta la 1922/1923 ocho cambios en la presidencia, destacando en esta época a dos presidentes que ocuparon el cargo hasta en dos ocasiones: D. Carlos Alarcón de la Lastra y D. Gil Gómez Bajuelo. El primero, periodista del diario tradicionalista “La Unión” y desde 1929 en la edición sevillana de ABC donde escribió innumerables artículos donde recordaba el golpe militar en Sevilla de Julio del 36 en el que se vanagloriaba de haber tomado parte del bando sublevado,como ocurrió con el articulo publicado en ABC el día 18 de Julio de 1957.
Por otro lado,Carlos Alarcón de la Lastra fue un personaje muy importante en el club, donde además de presidente y directivo, ejerció de “secretario técnico”, descubriendo a gran cantidad jugadores que luego triunfaron en el equipo bético. Perito aparejador, trabajó en el Ayuntamiento de Sevilla desde donde ayudo en lo posible para que se le cediera el campo del Patronato a su club. Estuvo inculpado en el fallido golpe militar del General Sanjurjo. Fue hijo de Carlos Alarcón de Maneascu, director de la Fabrica de Tabacos, militar, como el resto de hermanos entre los que hay que destacar a su hermano Luis, capitán de artillería, gran terrateniente, ex diputado por la C.E.D.A., y ministro con Franco, y a su otro hermano, José, directivo bajo su presidencia y la de Gómez Bajuelo, o a otro de sus hermanos, Alfonso, también presidente bético en la temporada 42/43 y directivo en la 31/32 y que según sabemos gracias al prestigioso historiador Juan Ortiz Villalba (“Del golpe militar a la guerra civil. Sevilla 1936”) tuvo junto al resto de hermanos gran protagonismo en el golpe militar en Sevilla.
Dicho lo cual, el que se quiera ver en el ángulo superior izquierdo del contrato del entrenador, D. Cesar Miguel de los Reyes de 1928, (el que escribe estas líneas tiene copia de dicho contrato), una bandera de Andalucía en lugar de la de el Real Betis es, por llamarlo de una forma suave, poco serio.
Los colores del Real Betis, nada tienen que ver con la bandera de Andalucía.
Por ultimo, argumentar que los colores del R. Real Betis no tienen alguna vinculación con aquella Asamblea de Ronda en la que el padre de la patria andaluza, Blas Infante, designó el verde y blanco como los colores de la bandera andaluza, lo único que demuestra es un desconocimiento total no solo de la Historia del Betis, sino de las personas que con nombres y apellidos forman parte de dicha Historia. Parafraseo lo que D. José Fernández Zúñiga “Agonía” dijo años después, alguien que, al contrario que Andrés Aranda, no entró a formar parte del club en 1921, sino que fue uno de sus fundadores y que volvió en 1917, para arrimar el hombro en unos años dificilísimos para la entidad.
Siempre me llamó la atención que se vinculasen los colores de la bandera de Andalucía con el Betis, máxime teniendo encuenta que aquellos militares que rifieron los designios béticos fuesen militares y por lo tanto poco dados a los "regionalismos", sino a todo lo contrario por lo que hemos podido comprobar.
ResponderEliminarAntonio Burgos, en uno de sus artículos, ya expresó esta cuestión en contra en su momento.
Gran artículo, amigo Pepe. Felicidades
Magnífico artículo Pepe, como siempre que vuelcas tu pluma en la palangana.
ResponderEliminarLos investigadores verdiblancos tienen el tema sobre la mesa. Esperemos que en la próximas próximas jornadas de historia del Fútbol (¿habra una próxima no?) "actualicen" este tema.
Un abrazo.
Genial, Pepe.
ResponderEliminarCada color en su sitio.
"Verde que te quiero verde."
Me parece un trabajo serio y elaborado, enhorabuena.
ResponderEliminarPepe Melero debe ir pensando ya en afrontar la dura tarea de ir poniendo en pie la historia del Campeonato de Andalucía, ese gran desconocido, e incluso por qué no, crear un blog donde vaya dejando ver las muchas historias que sin duda tendrá en sus carpetas con documentación, todas interesantísimas.
Reitero mis felicitaciones por el trabajo.
Se habrá leido el colega Fedriani todas estas bofetás sin manos que le das a su librito?
ResponderEliminarEl que debería hacer un libro, o una enciclopedia, eres tú!!!!!
Un saludo.
Magnifico post, otro mito de la lechuga mediatica por los suelos, la verdad es que despues de todo lo desmostrado ya en este blog sobre todos los topicos del futbol sevillano, solo me queda una reflexion. Si todo esto, todas estas mentiras, se fraguaron tiempo atras, mi pregunta es porque desde nuestro bando sevillista, no se contrarestó esta propaganda para que no cuajase, como asi hemos comprobado, a lo largo de la historia, y no tener que desmentirla tantas decadas despues. No se si es porque, como en parte ocurre tambien ahora, ellos tambien dominaban entonces los medios de comunicacion en Sevilla????, o algo mas.....(politica, militares, etc...).
ResponderEliminarLa conclusion que se saca de todo esto, es que para tapar su gran inferioridad que tenian hacia el Sevilla F.C., y la diferencia de grandeza, titulos conseguidos, y proezas deportivas, utilizaron todo este victimismo y propaganda para tapar lo evidente. QUE EL SEVILLA F.C. YA ERA POR ENTONCES EL CLUB MAS GRANDE NO SOLO DE SEVILLA, SINO DEL SUR DE ESPAÑA.
Esto me recuerda a las tacticas que pone en practica el odiado portugues en el r.madrid, para desviar la atencion y que no se hable de lo grandioso e historico de lo que ha conseguido el barcelona. No os suena que son historias paralelas......, con la salvedad de que las mentiras aqui llevan casi un siglo.
Gracias y un saludo para todos los SEVILLISTAS.
DAVID DH
Buenísimo artículo de investigación. Mi enhorabuena al autor.
ResponderEliminarY leído el mismo, saco en conclusión, que tenian un cacao-mental entre ellos..... en todo lo relacionado a sus orígenes..... que todavía les persigue en el tiempo..... así les va.
Cimientos blandos, con el tiempo, casa ruinosa, o dixo en tono jocoso, lo que es igual hoy en dia a una jaula de grillos, o lo que es lo mismo, sonidos sin sentidos, sonidos estridentes.
Vamos un club del TBO.
SFC1905
Sería interesante que los señores que debatieron tanto sobre el asunto de la cerveza dejaran alguna opinión sobre este asunto, no ya dar las gracias por el trabajo, sino al menos para opinar sobre sus colores.
ResponderEliminarEs maravillosa la historia del fútbol sevillano.
Magnífica labor de investigación...A partir de ahora ningún bético me va a engañar con los colores. Gracias por documentarnos.
ResponderEliminarSaludos.
pero hombre de Dios...otra vez liao con el betis?...y las que quedan,,,que le ha hecho a usted? la verdad,parece un blog del betis,,,cuando el proximo pots del betis? saludos FG.
ResponderEliminar... y los que le quedan, no desespere ¿y usted qué hace entrando en un blog sevillista y encima comentando en él?
ResponderEliminarSi es que...
Por cierto, señor FG podría usted darle las gracias al señor Melero por descubrir de dónde vienen los colores de su equipo. Es lo menos que podría hacer.
ResponderEliminarSaludos.
ResponderEliminarExcepcional, Don Pepe Melero. Excepcional.
Los que abordan éste magnífico blog y sus magníficos colaboradores en modo anónimo (que no lo son tanto pues se divisa el color pepino a la primera letra), deberían considerar, si el pepinismo no les ciega, que es un trabajo excelente sobre FUTBOL SEVILLANO; que para hablar de FUTBOL SEVILLANO, hay que hacerlo del Betis y del Sevilla; que la investigación no tiene colores, que no podemos seguir alimentando las leyendas urbanas porque la Historia, debidamente investigada, nos pone a cada cual en nuestro sitio... con documentos, no con historietas perversas.
D. David DH, permítame: han sido décadas de soportar una auténtica avalancha de falsedades interesadas. El Sevilla, a lo nuestro, siguió creciendo, ganando y atesorando méritos y títulos, muy por encima del resto del Sur. ¿Cómo contrarrestar lo que no puede ser conseguido en los terrenos de juego y en las vitrinas? Inventando, mintiendo, falseando e imputando al otro la autoría de sus propios fracasos.
Además y en efecto, D. David, siempre han manejado mucho mejor que nosotros los medios. En eso hay que reconocerles su superioridad... hasta ahora. Ya no.
Un detalle: cuando tras años y años de achacarnos lo del "equipo de la derecha" y de los "fachas" las investigaciones señalan, sin el menor género de dudas, que muchos de ellos estaban implicados directamente con el golpe de Franco (mas otras lindezas de igual calado), ellos, los que se autoproclamaban "equipo de las izquierdas" y "del pueblo", deben recoger velas porque se les desmorona el tinglado. De hecho, siempre me ha chocado que en siendo tan supuestamente de izquierdas, defiendan con tanto ardor su corona. No me cuadra. Me suena a relación imposible.
¿Qué hacer para recupar algo de la leyenda desvirtuada y arrasada? Pues nos intentamos desplazar sibilinamente hacia Blas Infante y así tratamos de conectar de nuevo con el pueblo, una vez perdida la supuesta conexión anterior.
¿Vé ahora por donde van los tiros?
Por suerte para todos (incluídos los pepinos de bien, que lo hay y muchos), las pruebas y los documentos permiten ubicarnos correctamente en el pasado.
Solo cuando comiencen a reconocer que 9,5 de cada 10 leyendas son falsas (el 22-0, Antúnez, Sánchez Pizjuan, el Estadio de la Exposición...) podremos sentarnos todos (ya lo hemos hecho) y reescribir la Historia sana y limpia de nuestro fútbol.
Y deberán reconocer que siempre estuvimos por encima y fuimos mejores. Eso no deshonra a nadie.
Desde hace unos pocos años, se terminaron las falacias interesadas. Ya no. Ahora hay Palanganas, Meleros, Voladizos, Ayeres y hoy, Cornelios, Puertas15, Sevillistasoy, Juanes, Algarivos... que forman un frente insuperable para poner las cosas en su sitio.
Insisto, D. Pepe, un trabajo excepcional. Prodíguese más, por favor.
Gracias.
Cuidaros.
Magnífico y documentado trabajo. Al hecho de apropiarse del andalucismo quiero añadir un dato: la bandera del Betis. Antes de que se retomase, en los años 70, la bandera andaluza (digo retomase porque una mayoría no la conocíamos y supimos cómo era entonces) la bandera del equipo bético reproducía la disposición de las barras del escudo en horizontal, es decir, tenía trece barras verdesy doce blancas, pero en sentido horizontal. Apropiándose del diseño de la de nuestra región, la cambiaron para que fuese similar, algo que, por ejemplo, no ha hecho otro equipo andaluz con los mismos colores: el Córdoba C.F.
ResponderEliminarAñado que me ha contado un bético que una consejera de ese equipo, de ese consejo de administración surgido de una intervención judicial de unas acciones cuya adquisición es objeto de un sumario penal, y que al parecer (eso me ha dicho, la verdad que no lo sé) es la directora del archivo de Indias, va a demostrar lo de 1907. No sé qué hay de verdad en todo ello (digo en lo de la consejera y en su profesión, lo de 1907 está claro que no es cierto).
Scottero
Para Scottero:
ResponderEliminarIsabel Simó es consejera del Real Betis y directora del Archivo General de Indias.
Es hija de Manuel Simó, Secretario del Betis Balompié en 1936, y el que recogió los papeles en la calle Bilbao cuando la bomba.
Para el Sr. Ariza:
Yo lo de la izquierda y lo corona lo tengo a superado. Lo qaue yo no acabo de entender es lo de monarco-republicano...
Para Pepe Melero:
Después de leerlo otras dos veces, solo puedo decir una cosa: ¡OLE!
Yo la pregunta que me hago es donde está el sr. Zancarron y donde el sr. Medina tan asiduos a las webs y blogs ¿Donde?
ResponderEliminarHay ocasiones, como esta, en la que los silencios hacen más ruido que las palabras,¿que no?
Resulta curioso el detalle de que los historiadores Sevillistas descubran más cosas del otro equipo de la ciudad que los del club propio, sin acritud hacia ellos pero es un dato que me llama poderosamente la ateción.
ResponderEliminarUn abrazo!!