14 DE OCTUBRE. FELICIDADES.

Cuentan las lenguas antiguas, que un 14 de octubre nació una ilusión. Una ilusión intacta, pétrea, granítica e imperturbable a pesar de los últimos descubrimientos fundacionales de 1890.

El 14 de octubre no está desactualizado en absoluto, es más, es la fecha oficial del nacimiento sevillista hasta que el Club no diga oficialmente lo contrario, sabiendo que fue la fecha en la que aquellos jóvenes emprendedores, sin saber aún el lío que formarían durante 107 años después con aquel acto, se vieron casi obligados a inscribirse en el Libro de Registro del Gobierno Civil debido a dos factores fundamentales.

El primero era a todas luces en forma de reconocimiento ante los ciudadanos de Sevilla y sobre todo ante la autoridad, que les perseguía por indecorosos y gamberros, al jugar por lo que ellos consideraban “en calzoncillos” en la vía pública. Incluso conocemos el nombre de aquel sargento de los guardias que corrían tras ellos porra en mano, Moreno, que tras la inscripción registral no tendría más remedio que envainársela, porque la actividad era ya completamente reconocida por la autoridad competente.

Una inscripción que no tenía, como hoy mismo, una función fundacional, sino informativa y declarativa, especialmente ante terceros. La fundación de una Sociedad según la Ley de Asociaciones de 1887 es efectiva desde el mismo instante en que un grupo de personas se reúne con el propósito de ejercer la actividad, eligen junta directiva y ponen en marcha su reglamento y normativa interna, algo que sucedió un 25 de enero de 1890 y hasta la fecha nunca se produjo una disolución de aquella Sociedad.

El segundo factor provendría de forma externa al comenzar a ponerse en marcha los primeros campeonatos en España. Así sabemos que desde 1902 clubes como el Madrid Footbal Club, el Athletic Club de Bilbao, o bien el Football Club Barcelona entre otros, comenzaban a organizar torneos para los que uno de los requisitos de participación era el propio registro en el Gobierno Civil correspondiente.

Estas razones son de por sí lo suficientemente importantes como para celebrarlo por todo lo alto, al igual que lo hicieron ellos mismos al día siguiente, un 15 de octubre, en los altos del Pasaje de Oriente ¿No llevarían ya años jugando quizás?

Los Zapata, Gallegos, Tiburcio Alba, Hammich, Ybarra, Langdom, Juan Mejías, etc. se reunieron en aquel local, restaurante propiedad de M. Paul Bousquet, estaba situado en la calle Sierpes número 76 y tenía puertas a la propia calle Sierpes y a (Manteros), General Polavieja. Contaba con un salón principal y con una serie de salones en la planta superior.

El menú de aquella noche fue confeccionado cuidadosamente por Tiburcio Alba con la siguiente definición de los distintos platos:

“Sopas al centro delantero”
“Pescado al medio ala”
“Pollo al defensa”
“Ensalada del balón”
“Dulces al portero”
“Vinos campeonato”
“Moka al árbitro”

¿Se atreverían ustedes a preparar un menú para conmemorar estos 107 años?

Y con esta ilusión debe celebrarlo el sevillismo igualmente hoy, porque la ilusión de la que habla nuestro himno del Centenario se renueva una vez más por aquel acto oficializador, que los Estatutos de 1914 recogen para que no fuese olvidada la fecha para la posteridad. Así fue.

Una sorpresa que la historia nos reservó fue la del nacimiento del primer presidente sevillista en 1890, Edward Farquharson Johnston, cuya madre lo alumbró un 14 de octubre de 1854 igualmente, cuestión esta que aprovechamos para presentarles una nueva fotografía que nos envían desde Escocia, de su ciudad natal, Elgin, sus descendientes.

FELICITACIONES A TODO EL SEVILLISMO Y ESPECIALMENTE A TI, QUERIDO LECTOR. HOY ES UN DÍA GRANDE.

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