LA PALANGANA MECANICA: romanones

Mala combinación esta de política y fútbol, pero esto es como la vida misma.

No crean que es fácil –al menos para mí- hacer un blog con tanto contenido de “investigación”, acertada o no. Lo digo en entrecomillado porque ya me gustaría tener el tiempo suficiente y la capacidad como para investigar lo que algunos monstruos de la historia del fútbol sevillano hacen y yo siempre ando a “salto de mata” con este tema. Y digo que no es fácil porque a veces te llevas días sin escribir, porque no tienes clara la conclusión a la que quieres llegar, en un principio por simple sospecha… pero finalmente se llega.

Contar la historia con cierta imparcialidad en un tema como este, donde el forofismo nos pierde, tampoco es fácil, pero eso se palia con la presentación de datos y documentos que fundamenten lo que quieres contar con cierta objetividad.

Al Sevilla FC se le ha venido colgando el “sanbenito” de equipo conservador, incluso aliado fascista desde tiempos inmemoriales. Club de señoritos, potentados y élite de la sociedad sevillana, que oprime sin piedad a los seguidores del otro equipo de la ciudad y que hace lo imposible para que no levante cabeza.

Ser el equipo grande y poderoso de Andalucía no significa ser el equipo conservador, aunque en determinados momentos lo fue, al igual el equipo menos grande de la ciudad, más si cabe, aunque no quieran reconocerlo. Ser conservador no tiene nada de particular por ser una tendencia política más como otras, pero que sea mentira y que sea opresora de los béticos es otro cantar.

Ya en sus inicios los fundadores del Sevilla FC tuvieron ideales liberales. Lo liberal de la época, tendría una referencia política trasladada a nuestros días parecida a un centro derecha. La izquierda tal y como la conocemos no existía como tal.

Jose Luis Gallegos Arnosa, primer presidente sevillista, viajaba desde su juventud frecuentemente al Reino Unido por temas de estudios principalmente. No tendría nada de extraño que en sus reuniones en los pubs ingleses y en los corrillos universitarios se empapase de la nueva corriente política que recorría Europa.

Cuando se fundó el Sevilla Football Club, en el discurso inaugural de Jose Luis Gallegos dijo aquella frase:

"... en este club tendrán cabida todas las personas sin diferencias de clase, políticas o religiosas..."

Esta frase que en nuestros días tendría una importancia mínima por la normalidad democrática en que vivimos, en 1905 era todo un desafío a las estructuras políticas y religiosas existentes. No era nada fácil decir eso en aquella época y es algo más que un indicio para dejar constancia del carácter progresista de los inicios del sevillismo y supondría toda una declaración de intenciones.

Por los lugares donde se reunían todos aquellos pioneros sabemos también del carácter liberal de sus componentes y sus aportaciones políticas a la ciudad de Sevilla.

En la etapa del Campo del Círculo Mercantil, sabemos la simpatía de estos por la República, que aunque ello no signifique una idea liberal de la época en sí misma, puesto que también había conservadores pro-republicanos, pero en este caso si había un cierta empatía por la “modernidad” y por el progresismo, por lo que el Sevilla FC casó perfectamente con esos ideales. El Football encajaba perfectamente con ese progresismo republicano que “reinaba” en el Círculo Mercantil con Montes Sierra a la cabeza.

No obstante es necesario reseñar que el football en esos momentos es un “sport” de la “clase bien” sin ningún género de dudas, sin embargo el Sevilla FC sería el primer club de Sevilla en incorporar trabajadores y/o obreros en sus filas. Ya se conoce el caso de Manuel Pérez, de Peizoto, trabajador de la pirotecnia y Martin Toledo que era mecánico y chofer del prestigioso médico sevillano Artemán.

En estos primeros momentos de su fundación y primeros pasos, no se observan aparentemente elementos que configuren un Sevilla FC conservador.

No obstante, en estos inicios el precursor del actual Real Betis, (siempre curiosa esa dicotomía de “Real” con el equipo de los pobres), el Sevilla balompié fue fundado por los hijos de la cúpula militar sevillana, con nombres que no volveremos a repetir por reiteración.

Ya en esos inicios aparece una figura en la directiva del balompié llamado José Cuesta Moreneo, que sería luego conocido por haber sido el organizador del golpe militar de julio de 1936 encabezado por Queipo de Llano en Sevilla.

No mucho más tarde, se observa un listado enorme de socios de honor compuestos por nobles, (marqueses, condes, vizcondes…), potentados, militares de alta graduación,… veamos algunos:

D. Antonio maura, (Presidente del partido conservador), Marqués de Viana, el Conde de Romanones, Don Carlos Cañal, Capitán general de Andalucía, etc… entre otros muchos de parecida idiosincrasia.

Es por tanto en estos inicios del Real Betis un equipo que representa el conservadurismo más recalcitrante de la ciudad de Sevilla a la perfección.

¿En qué momento apareció el mito del equipo opresor, (Sevilla FC) y el equipo oprimido (R. Betis)?

La historia no ha hecho más que comenzar… continuará.

Gracias a Vicente Álvarez por sus pistas.

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